viernes, diciembre 16, 2005

Con la maleta hecha

Ya solo me quedan dos días para abandonar esta gélida tierra, ME ESPERAN MIS VACACIONES EN FUENGIROLA. La última semana ha sido un poco movidita, que si trabajo, maletas, diversión, viajes… pero bueno ya os lo contaré personalmente dentro de dos días. Como en el gran Mittersill no hay aeropuerto, mañana tengo que ir a Salzburgo y el domingo a las 7 de la mañana mi avión despegará rumbo a España. Con respecto a este, el que será mi último viaje en Austria por las próximas tres semanas he tenido suerte, ya que lo realizaré en coche, porque mi profesor de alemán tiene que ir ese día a Salzburgo también. Supongo que allí… bueno algo haré, ya os contaré.

Hasta el domingo.

Os dejo esta foto navideña.

viernes, diciembre 09, 2005

En trineo

Ayer mi profe de alemán y una amiga suya me llevaron la pista de trineos de Mittersill, y tuve mi primera experiencia con los deportes de invierno (si excluimos las guerras de bolas de nieve claro). Lo cierto es que fue bastante divertido, la pista tenía dos o tres kilómetros de largo y si no fuera porque tenía un montón de curvas, árboles alrededor y porque era completamente de noche, hubiera sido perfecta. Aunque si he de ser sincero, no necesitaba ninguna de las tres cosas para darme la ostia.

La pista esta en medio de una montaña y para acceder a ella, hay que andar un “poquito” con el trineo a cuestas, por un camino que va desde la pista de esquí de fondo de Mittersill hasta un Gäshof (algo así como una posada) que hay perdido por el monte. La primera vez que me lancé por la pista fue pa probar el asunto, y bueno con deciros que me hinche de comer nieve os hacéis una idea no. La segunda fue siguiendo las tradiciones austriacas, es decir hacerlo medio borracho (también es válido hacerlo completamente borracho) así que nos fuimos a la posada esa a beber glüwine (el famoso vino caliente ese del que os he hablado tanto) y después bueno, después nos fuimos jugarnos la vida otra vez. Aunque no se como pero la segunda vez me fue mejor que la primera.


Como experiencia deciros que esta de puta madre (de vez en cuando esta bien eso de vacilarle a la integridad física) y espero poder repetirlo más veces, porque me lo pase como un niño, vamos que muy bien. Aunque el que mejor se lo pasó sin duda fue mi profesor de alemán, que se hinchaba de reír cada vez que me caía.

Pfiati.

lunes, diciembre 05, 2005

Krampus Show

Ayer domingo fue el desfile del Krampus en Mittersill. ¡El Krampus ya sabéis! la fiesta esa de los demonios de la que hablé anteriormente. El desfile duró dos horas y media en el participaron demonios, brujas, ángeles y la versión austriaca de papa Noel. El desfile fue en Markplatz, que es la plaza principal de Mittersill, la cual estaba abarrotada de gente que venía de todas partes para ver el espectáculo. También venían demonios y brujas de otros pueblos a participar en el desfile.


Esta curiosa y antigua tradición es típica de esta región, aunque se ha ido extendiendo a otros lugares de Austria. Los festivales se desarrollan durante diciembre y las fechas varían según el pueblo o ciudad. El objetivo es ahuyentar a los demonios de las tierras y es una tradición de los campesinos (aunque yo todavía no comprendo como se espantan a los demonios disfrazándose de demonio).


El desfile empieza con los ángeles (que eran tías disfrazadas, que por lo general estaban bastante buenas) y con papa Noel, a continuación las brujas y los demonios hacen su aparición, los demonios, o mejor dicho los que van disfrazados como demonios, se comportan como tales, pegan a la gente con látigos y varas de madera, aunque normalmente no se ensañan mucho y no hacen daño, pero siempre hay excepciones y a algunos les dan por repartir leña , aunque normalmente eso solo se lo hacen a la gente que conocen, afortunadamente ningún demonio me conocía, además Fernando estaba inteligentemente protegido por una pequeña montañita de nieve y ningún demonio llego a atizarme, bueno uno lo intentó, pero se resbalo con la nieve que había delante mía y se calló al suelo (¡toma cabrón castigo del zeñó por meterte con un españó!), ocurriéndosele al insensato del que había a mi lado reírse de la caída del pobre demonio y claro tras lo cual el demonio se ensaño a ostias con el.


Cuando el desfile acabó, empiezo una especie de teatro-baile. Las que van disfrazadas de brujas hacen un conjuro e invocan a los demonios, los cuales tras decapitar a las brujas con una guillotina se ponen a bailar, y ojo al dato, con música heavy, Ramstein para ser más concreto. En el baile los demonios luchan entre ellos se acercan al público, gastan bromas a los espectadores… Pero al final aparece un tío extraño, supongo que era un cura o algo así, que dice una parida to rara en alemán y los demonios se convierten poco a poco en personas. Pero lo mejor fue, que mientras el cura dijo el conjuro y los demonios se convertían sonaba una canción de nightwish “10th man dawn”, ¡¡¡joder de nightwish!!! Dios yo estaba flipando. El espectáculo duró unos 45 min. Fue alucinante, la coreografía era cojonuda, la música era aceptable (sobre todo la de nightwish) y bueno los disfraces como veis en las fotos eran de alucine.



Tras el desfile la gente como no seguía la tradición de beberse el vasito de Glühwein, bueno la mayoría se bebía más de uno y bueno en fin yo me bebí cuatro. El Glühwein es básicamente un vino especial caliente con azúcar y canela. El mejunje tiene bastante alcohol y tiene la propiedad de quitar el frío del cuerpo en un periquete sustituyéndolo por un cebollazo de cojones. Tenéis que probarlo, intentaré enterarme de la receta. Ya a eso de las 11 llegué a casa más feliz que unas castañuelas, no si por el vino o por lo bien que me lo pase en general, además de camino a casa encontré un guante de demonio tirado en el suelos, así que además me llevo un recuerdo.

Trabajo en Saalfelden

Como algunos de vosotros sabréis, el martes pasado empecé a trabajar en Saalfelden, que es una ciudad de esta a 43Km. de Mittersill. Trabajo en una asociación para niños y jóvenes y se supone que tengo que trabajar tanto en el jugendzemtrum (centro juvenil) como en el kinderzemtrum (algo así como una guardería). La verdad es que me encanta trabajar en la guardería, los niños son muy divertidos y siempre me están preguntando cosas para ellos es algo bastante nuevo el conocer a alguien de otro país completamente diferente y ven en ello una oportunidad para aprender, que por ahora los jóvenes del jugendzemtrum creo que no aprovechan. Trabajar en el jugendzemtrum es bastante aburrido, no solo porque no van muchos jóvenes, sino porque estos son bastante sosos y no hablan apenas, solo entre ellos. Los jóvenes son en general bastante cerrados, yo creo que es porque están bastante reprimidos desde la infancia. Además son bastante violentos entre ellos, supongo que serán las hormonas (la mayoría tiene entre 13 y 16), por lo que generan un ambiente que es de todo menos agradable.

Mi trabajo en Saalfelden es completamente voluntario y solo voy si quiero (por ejemplo la semana pasada solo fui tres días), y el tiempo que quiero, así que para que engañarnos, intento pasar más tiempo en la guardería que en el jugendzemtrum. Además en la guardería estoy aprendiendo un montón de alemán con los niños. Tampoco penséis que allí me mato a trabajar, normalmente solo trabajo tres o cuatro días por semana y alrededor de unas tres o cuatro horas por día, aunque a esas horas hay que sumarle las que tardo en el ir y venir, que ronda entre las dos o tres horas dependiendo el día y la hora, lo cierto es que la comunicación por tren entre Saalfelden y Mittersill es una mierda, ya que siempre tengo que coger dos trenes o un tren y un autobús. El trabajo en si no es duro y lo único que tengo que hacer es jugar con los niños, hablar con los niños y con los jóvenes (estos últimos si se dejan claro), vigilar que nadie se mate, que nadie intente matar a otro o que no destrocen el material. Aunque por ahora todo el mundo es respetuoso conmigo, hacen caso de lo que les digo y en general me tratan bastante bien

Como anécdota deciros que cuando juguéis a las cartas con niños nunca penséis “venga no voy a ser muy perro que solo son niños” ya que ellos son unos pequeños cabroncetes jugando. De hecho el jueves estuve jugando con ellos al uno y al solo (dos juegos de cartas) y no gane ni una sola vez, es más quede el último la mayoría de las veces, algo de lo que no me siento especialmente orgulloso.