El sábado por fin pude ver la fortaleza de Salzburgo (Hohensalzburg), que esta encaramada en lo alto del monte Festungsberg, las vistas de Salzburgo desde lo alto de las torres del castillo son increíbles además dentro del castillo puedes ver cantidad de pequeños museos: el museo de las marionetas, un museo de armas y por su puesto el museo del castillo. Aunque había subir todas aquellas cuestas y escaleras para legar a este, el esfuerzo merecía la pena además la entrada era gratis para las personas residentes en el estado de Salzburgo o sea que me salio por la cara, para los demás pringaos son 8,40€. Ese mismo día visité además la casa donde vivió Mozart y su familia (Mozart Wohnhaus) mientras estuvo en Salzburgo. La casa esta cerca de los jardines Mirabell (unos jardines preciosos) en pleno centro de la ciudad y era la casa de un maestro de baile. La visita a Mozart Wohnhaus, estuvo bastante bien, con una audio-guía en Español bastante interesante, así que por primera vez en las tres semanas que llevo aquí pude enterarme bien de algo, ya que mi alemán por ahora no pasa del hola, adiós y poco más.
El domingo nos invitaron a todos los voluntarios ha hacer pizza en un horno de leña. Fue un día bastante relajado y tranquilo dando paseos, hablando, cocinando, haciendo el idiota… o sea ese tipo de cosas que no requieren esfuerzo intelectual o físico, lo cual era de agradecer después de la juerga de la noche anterior. Ese día conecte con mi lado chef ya que mi pizza estaba cojonuda, aunque bueno esto también se le puede atribuirse a que llevaba más de 15 horas sin comer y cualquier cosa me sabía a gloria, por si fuera poco, todo era de gratis así que aproveché y me zampé 2 pizzas y 2 ensaladas además de ponerme hasta el culo de vino y cerveza tras lo cual me tire dos horas en estado semicomatoso tumbado en el césped con los demás. Hasta que más tarde, ya nos fuimos la residencia.